Hola, soy Vanessa, tengo 25 años y ese día fue el mejor día de mi vida. Estaba yo en mi casa y decidí irme al Sex-Shop que queda enfrente de mi edificio, me puse unas falta cortita blanca sin bragas, y un top azul sin sujetador, agarré mi cartera y bajé en el ascensor no me encontré a nadie, luego en el pasillo se me cayó la cartera y cuando me incliné a recogerla el vigilante me dijo:
Señorita creo que debería pararse, y yo haciendo como si no lo había escuchado me pasé la mano por encima de mi coño depiladito hasta que llegué a mi ano y me metí dos dedos que entraron con facilidad, pegué un gritito de placer y de pronto escuché como el vigilante se corría ya que se había estado masturbando, (después de eso nunca me vio igual )
Luego salí como si nada, crucé la calle y llegué al Sex-Shop y miré a ambos lados de la calle para ver si nadie que conociera me viera entrando allí, no había moros en la costa, y pasé, había un pasillo y luego otra puerta, abrí la puerta y habían dos mujeres que estaban viendo consoladores de dos puntas (se notaba que eran lesbianas), un muchacho como de unos 24, el vendedor que aparentaba unos 20, y un señor que aparentaba 45.
Los respectivos hombres me miraron así como que, -Hay que follarsela aquí mismo- Claro con el culo, las tetas, y las piernas que tengo cualquiera, bueno pasé y fui a unas parte del lugar que era más oscura todavía, y había una cortina al lado de mí, escuché un grito, asomé la cabeza y vi a una mujer que tenia dos pijas en el culo, dos pijas en la boca, y dos pijas en el coño, era una imagen de una película porno.
Sentí como se humedecía mi coño, entonces cerré la cortina cuando el encargado de la tienda me dijo que deseaba y yo quedé cortada, le dije que lo llamaría cuando deseara algo y él asintió con la cabeza, al rato se fueron las lesbianas con cinco bolsas, mientras yo veía los consoladores se me cayó uno, me incliné a recogerlo y el muchacho de la tienda me vio todo el coño, me levanté rápido, y metí el consolador en la cesta que llevaba, luego agarré dos vibradores, un aparato que se llama Venus II y que se podía llevar a todos lados, puesto era como una pija de goma que crecía cada vez que tú le dabas a una bolsita que traía, era como tener una pija adentro todo el día, yo me la llevé para llevarla al trabajo y todo eso, era genial.
En todas estas yo estaba tan excitada que agarré cosas que no necesitaba, lubricante, bolas chinas, y cuando iba a agarrar un consolador de dos cabezas me di cuenta que eso si no lo necesitaba, pero el señor de los 45, me dijo que eso servia para Heterosexuales también que me lo podía poner el coño y en ese culo tan bello que tenia.
Entonces yo agarré tres. Estaba tan excitada que cuando iba a pagar al muchacho me dijo la cantidad que era, yo le di el dinero, y él me dijo que si quería probarlos, tan excitada estaba que cuando lo pronunció yo dije que siiiiiiiiii.
El Show: El muchacho puso el letrero de cerrado en la puerta, y me quitó el Top y me dijo: -Que grandes tetas tienes guarra- Mi me empezó a chupar los pezones. Mientras, el muchacho de 24 me bajaba la falda y decía: Viene Rueda libre que puta y se lanzó a comerme el sexo, mientras el mayor saca un dilatador anal gigante de su caja y yo le dije que ya no era virgen por allí y él me dijo: – Para esto – y se sacó la pija- es pequeño- y era verdad tenia una pija descomunal como de unos 24 cm algo así.
El muchacho de 24 se había apartado para darle espacio al de 45, mientras el vendedor sacaba los consoladores, de dos cabezas, y el muchacho de 24 sacaba las bolas chinas, el de 45 me empezó a meter el dilatador anal por detrás y yo le dije que lo metiera todo de una vez y me dijo -tú lo pediste- y me clavó todo la mierda esa, el dolor me desgarró, pero de repente sentí el placer cuando empezaba a sacarlo y a meterlo como si fuera una pija mientras los otros dos se estaban pajeando, de repente mi culo se adaptó al tamaño del dilatador anal y el
tipo me lo sacó del culo y me empezó a follar.
Era divino, eran espasmos sensacionales, que me atravesaban todo el cuerpo, recuerdo tuve 5 orgasmos, así estuvimos un rato mientras los otros tíos se pajeaban, luego el de 45 se corrió adentro de mí yo sentía como la esperma corría por mis entrañas y hasta me salió por el coño, luego cuando la iba a sacar el vendedor le dijo:
Espera no la saques, ¿tú crees que a esta puta le quepan 2 pijas en ese culo?- y el de 45 le dijo: – Claro que si, hasta tres- y como el vendedor tenia en la mano los consoladores de tres cabezas dijo: -2 de verdad y uno de mentira, ¿estás de acuerdo puta? – me dijo- y yo le dije gritando: Mira maldito, metémelos todos y las pollas de ustedes también pero termina que estoy excitada- el tipo de inmediato me metió la polla empalmada por el culo, uhmmm dije:
Ahora mismo me estoy corriendo… mmmmmmmmmmm… es que me estaba metiendo los tres consoladores de dos cabezas en el coño… mmmm que exitannteeeeeeeeeeeeee… ah, ah, ah, ah, ah, ah, ah, ah –
Volviendo a la historia estaba yo con dos pollas adentro de mi culo desgarrándome excitantemente, cuando salieron los tipos y la tipa que estaban follando en la tras tienda diciendo: – ¿qué pasa aquí? y dijeron a bueno, por no haberme invitado a la fiesta ahora te vamos a hacer lo mismo que a esta puta- y le metió la mano entera a la tipa por el coño.
En ese momento me corrí pegando gritos de placer…el tipo que dijo lo anterior se situó detrás de mi metiéndome su polla por el culo, también en ese momento me desgarré de dolor pero otra vez un orgasmo, y más gemidos y gritos de mi parte, de pronto, los tipos que estaban en la trastienda con la tipa, empezaron a agarrarme las tetas y a masturbarme, mientras los otros tres me follaban por el culo.
De pronto me di cuenta el muchacho de 24 se había ido, yo me pregunté donde estará pero de pronto las tres pollas se salieron de mi interior al mismo tiempo quitándome otro gemido de dolor.
Autor: Vanessa